Cómo preparar una entrevista teléfonica
Lo más importante es que estemos preparados para este tipo de entrevistas, de este modo evitaremos contestar de un modo frío y distante cuando el entrevistador nos llame. Para ganar tiempo, uno de los argumentos que podemos exponer es que en ese momento estamos atendiendo otra llamada por la otra línea, o que estamos conduciendo.
Después le diremos al interlocutor que nos llame en otro momento y concretaremos la hora para estar preparados. Otra opción es establecer que seremos nosotros los que llamaremos y le preguntamos cuándo le iría bien atendernos.
Cuando nos encontremos con una situación de este tipo, es aconsejable que preguntemos también el nombre de la persona que nos llama, así como apuntar su teléfono y el motivo de su llamada. Todos estos datos nos permitirán conocer de qué oferta nos están llamando, si ya hemos enviado el currículum, o, si por el contrario, sólo atendimos un anuncio laboral. El entrevistador no se llevará buena impresión si no sabemos de qué oferta nos están llamando o a qué puesto aspiramos. Siempre debemos evitar comentar que hemos enviado tantos currículos que ya no nos acordamos.
En el momento de la llamada siempre debemos tener nuestra carta de presentación y nuestro currículo a mano porque es probable que nos vayan a efectuar preguntas relacionadas con nuestra formación o nuestra experiencia laboral. En este caso, es fundamental no dudar porque demostraremos muy poca credibilidad. También procuraremos tener a mano cualquier documento relativo a los trabajos o proyectos que hayamos realizado.