Cuidado con la postura
Tu postura puede ser un reflejo de tu personalidad. Por esta razón, los entrevistadores suelen fijarse mucho en ella. Es ideal que te mantengas siempre con la espalda bien recta, tanto cuando estés de pie como cuando estés sentado.
Debes tener mucho cuidado en la manera cómo te sientas. Asimismo, debes esperar a que el entrevistador te invite a hacerlo. Esto parece sencillo, pero los nervios a veces te pueden hacer cometer errores.
Los nervios también podrían hacer que optes por cruzar los brazos o por guardar tus manos en tus bolsillos. Evidentemente, estos casos son grandes errores que por ninguna razón deberías cometer.
Finalmente, debes ponerle atención a tu cuello, ya que tu mirada siempre debe mantenerse firme en la de tu entrevistador. Nunca agaches la cabeza, porque esto puede ser entendido como un síntoma de inseguridad.